Aunque es uno de los personajes más populares de nuestro país, apenas se sabe nada de él. Sin embargo, hay historias que te conmueven con sólo presentirlas, otras porque realmente son conmovedoras. La de Antonio con Rocío Durcal, después de décadas juntos, me pareció desde el principio extraordinaria. Atraída por esa rareza, la de un amor que no termina con la muerte, me acerqué a ese hombre aquella noche y apenas pude reconocer al cantante que había admirado tantísimo en mi infancia, cuando arrasaba en España con los Brincos en la década de los sesenta. Hinchado, demacrado, con los ojos enrojecidos, me sorprendió con su dolor mucho más intenso del que imaginaba, del que se podía presentir en sus escasas apariciones públicas. En tratamiento médico para superar su adicción al alcohol tras un mes ingresado en la clínica Tecnon de Madrid, pidió un refresco de naranja, hablamos durante horas, lloró y nos hizo llorar… pocas veces he visto alguien con un sentimiento de soledad tan profundo, un abandono tan absoluto, nos dijo que «no entendía porque no se había ido con ella, que no tenía razones para vivir, que se habían prometido estar siempre juntos y que ella no había cumplido su palabra…»
Durante meses quedamos para tomar nota de sus vivencias, al principio resulto muy difícil trabajar, se cansaba, lloraba cuando hablaba de Marieta (nombre familiar de Rocío Dúrcal), teníamos que hablar de cualquier otro tema hasta que volvíamos a su vida… poco a poco empezó a sentirse mejor, a recuperar los ánimos, fue entonces cuando nos contó, con esa memoria privilegiada que posee, los momentos más importantes de su existencia. Su familia en Filipinas, protectorado de Americano y adelantada años luz en la década de los cincuenta a España, del viaje que todos hicieron durante mes y medio de travesía en el Félix Roussel atravesando medio mundo: Saigón, Singapur, Sri Lanka, donde el joven y sensible Junior (así le llaman en casa porque se llama Antonio como su padre) vió peces voladores y frente a la isla de Sicilia el mismísimo volcán Estrómboli en erupción.
Me contó Antonio su llegada a España con naturalidad, pero también con cierta sorpresa cuando vio por primera vez la nieve, la forma de vestir de los niños con los pantalones bombachos que no le gustaba, su acercamiento al mundo taurino, tan ajeno a su infancia, gracias a un huésped de la pensión de su abuela Margarita: Carlos Ansoleaga, que había sido novillero; sus primeros días de colegio, -¿dónde esta Filipinas?, se preguntaban sus compañeros-. Sus rasgos afeminados le costaron la primera y única pelea de su vida. Recuerda con especial cariño sus primeros años como músico, una pasión en la que entró de la mano de su bella tía Marina, que le daba clases de piano en Manila, y que después perfeccionó con su primera guitarra. Saber inglés, su perfecta educación, su gusto musical y su elegancia hacían de él una persona atractiva que tardó muy poco en empezar a tocar en diferentes grupos: primero en Los Jumbs, después en los Pekenikes y finalmente en los Brincos, donde tuvo un enorme éxito.
Su atractivo en unión con su timidez y su exquisita educación hacía que las chicas se volvieran locas por él, y tuvo varías novias, incluso un amor imposible, procedente de Filipinas, que no pudo ser, ya que él entonces aún no era una persona importante y ella sí era de una familia rica, pero la primera vez que pidió a una mujer en matrimonio fue a Pepa Flores «Marisol», compartieron incluso un fin de semana en Roma, pero entonces un compromiso que excedía lo sentimental con Carlos Goyanes les impidió llegar más lejos, aunque siempre mantuvieron una gran amistad que hoy perdura. Tras Los Brincos formó pareja artística con Juan Pardo, creando el dúo Juan y Junior, un sólo disco y gran éxito con la canción «Anduriña» le colocaron de nuevo en lo más alto, pero había un problema: se había enamorado de la novia de Juan, la joven cantante Rocío Dúrcal, que había hecho muchísimas películas, una situación que se tornó insostenible y que resolvió la decidida Marieta declarándose a Junior. Al enterarse Juan no le dijo nada, pero un trabajo que tenían que hacer en común, la producción de un disco de Fórmula V, lo realizó él en solitario. Finalmente se disolvió Juan y Junior, y empezó su carrera como solista con el disco «Perdóname», que también fue un rotundo éxito, hasta que al cambiar de compañía discográfica a CBS grabó de nuevo, pero «congelaron» su trabajo para que no fuera la competencia de Miguel Bosé, que en los setenta iniciaba su carrera musical y que también llevaba la misma compañía. Sin embargo, ese disco «congelado» fue un gran éxito en Filipinas, donde Junior regreso para rodar, además, tres películas.
Con la precisión de un relojero suizo recuerda Junior cada detalle, cada momento vivido con Marieta, desde su boda en El Escorial a la que asistieron muchísimos famosos, su luna de miel en París y Roma y sus vivencias posteriores, incluso como dúo musical, primero en México, donde él reconoce que pasó una vergüenza espantosa en los números en los que tenía que hacer de flamenco acompañando a su mujer, después en España cuando ambos se apuntaron a la moda «unisex» y se cortaron el pelo por igual y se tiñeron de rubio vistiendo ajustados monos de colores, hasta que finalmente llegó el éxito de Rocío con las rancheras de Juan Gabriel en México, país donde la adoraban por sus películas. El cantante mexicano sentía una enorme atracción por la española, hasta el punto de que le llamaban «La Rocío» porque se vestía, cantaba y se movía como ella. El final de la relación fue extraño, Antonio reconoce en sus Memorias que a veces el mexicano se le insinuaba, que incluso llegó a espiarles a Marieta y él en su dormitorio cuando estaban en su casa, le califica de persona que tenía dos caras, con un sentimiento tortuoso de celos.
No se arrepiente de haber dejado la música por cuidar a sus hijos. Por estar con él en las Navidades de 1978, Rocío salió junto con su hermana Susana de Los Ángeles el 23 de diciembre y llegó el 25, preocupada de que el éxito de su marido entre las filipinas pudiera poner en peligro su matrimonio: ¿Cómo, que éstas me van a quitar a mi hombre? ¡De eso nada!, y era cierto que Junior estaba teniendo un romance con la actriz protagonista de las películas, Vilma, primero porque los productores le decían que era una forma de promocionar los films, a la gente le gustaba verles juntos, y también porque estaba sólo durante demasiados meses, por ello y porque en realidad a quien él quería era a su mujer, regresó a Madrid cuando terminó la tercera película a la que le obligaba su contrato, y ya nunca más volvió a alejarse de su familia. Sin embargo, cuando sus hijos crecieron se convirtió en el director musical de los espectáculos de su mujer y siempre la acompañaba, trabajó mucho siéndolo, pero fue poco reconocido por ello, sobre todo por la gente que llegó a tildarle de mantenido. En eso, como en tantas otras cosas, la pareja fue una adelantada a su tiempo.
No es muy niñero, pero quiere a su familia, adoraba aquellos domingos de paellas en los que se juntaban veinte o treinta personas y lo que más lamenta es la soledad de su casa de Torrelodones, ahora que sus hijos y su mujer no están. Los últimos meses de la enfermedad de Marieta los considera los peores de su vida, a su familia le dijo: «No quiero saber nada que no sepa ella», y ninguno de los dos supo hasta el final la gravedad de la enfermedad… pero él la intuía y por ello empezó a beber, a intentar evadirse, pero cada vez que iba a la cocina y veía que Marieta no comía, «temblaba»… una situación que se prolongó hasta después de su pérdida, cuando un día empezó a vomitar por la nariz y se dio cuenta de que si seguía así se moría: «No sé si se puede morir por amor -llega a decir-, pero sé que se puede por falta de amor». Sus hijos, que vivían su propio duelo, tuvieron que sacar fuerzas de flaqueza y llevar a su padre a una clínica de desintoxicación.
La familia se rompió tras la muerte de Rocío, ella era el centro de todo, una ruptura que se produjo por el dolor, por la falta de comunicación, por los malos entendidos… Shaila continuó su trabajo en México, país donde vive habitualmente, y mantiene permanente contacto con su padre, su boda con Dorio ha sido una de las grandes alegrías de Junior desde que muriera su mujer. De las diferencias con sus hijos mayores no ha deseado hablar en sus Memorias, por un razonamiento muy lógico: «entre padres e hijos a veces hay problemas pero al final se pasan». Sin embargo, de los meses posteriores al fallecimiento de su mujer, una persona del servicio muy cercana a la familia ofrece en sus Memorias un sincero y emocionante testimonio en el que se evidencia la soledad que llegó a sentir, cuando no se atrevía ni a dormir sólo y tenía que dormir ella con él en el salón.
Un momento especialmente mágico mientras transcribíamos, Elena Sendón y yo sus memorias, fue cuando nos contó que sueña con Marieta, ella no le habla, pero nota su presencia e incluso en ocasiones cree que le ha mandado señales, como una vez se le cayó un cepillo de ella, y a la vez una espuma de afeitar Williams, que al estar al revés era la «M», de Marieta, el cepillo significaba que había un contrato, y ese mismo día se firmó el de las memorias.
Hoy, Antonio Morales «Junior» ha recuperado las fuerzas y ese fino sentido del humor que posee, escribir sus memorias le ha obligado a reconocer que es un hombre afortunado por todo lo que ha vivido y aún tiene. Profesionalmente le gustaría volver a componer, pero no a actuar en público, cree que ese momento ya ha pasado. Hoy se declara «abstemio» e incluso aconseja a todos los que puedan pasar por una situación como la que él ha vivido «que no se refugien en el alcohol», aunque aún padece lo que él llama «yuyus» y que son como miedos, quizá por ello procura no estar sólo, los fines de semana los pasa con su madre y con Ricky, su hermano, también sus amigos le llaman, ve a sus nietos y empieza poco a poco a construir su propia vida, a ser él mismo, sólo, sin su querida Marieta, aunque ella siempre estará en su corazón.
Editorial: Martínez Roca
Colección: Fuera de colección
Precio: 19 €
ISBN: 978-84-27-03492-1
Tapa: Dura, 16 x 24 cm
Publicación: Noviembre 2008
11 Comments
Filibustera
Perdóname was never heard in the Philippines probably with the exception of those close to him in the Philippines. He was famous in the Philippines though for his Tagalog songs. He just suddenly left the entertainment industry in the Philippines and soon everyone forgot about him. I know he was trilingual; he spoke Tagalog, English and Spanish.
Estela Loera
Una Pregunta: Donde puedo Comprar Este libro . Vivo en México . En la provincia de Chihuahua. .? Admiró mucho A Junior. No Importa Que ya No esté en este Mundo.
hanae
hola a mi me encantaria tener este libro y como de momento no puedo permitirme comprarme este libro ojala me lo pueda comprar por que admiro muchisimo a antonio morales junior y a la gran artista rocio durcal que en paz descanse siempre lo seguira siendo,besos a todos y feliz navidad y feliz año nuevo!!!!!!!!!!!!!!!!!!
alicia gonzalez f 23 10 2010
siempre me gusto muc
MIGUEL P. CASTRO
Hace un mes que perdí a mi madre y el dolor, la nostalgia y el vacío es grande; pero, cada día que pasa recobro la tranquilidad puesto que comprendo que ella ahora descansa en paz ya que cumplió con todos nosotros, que ya tenemos una vida hecha. Mi querido Junior admiro tu fortaleza. A pesar que perder una pareja en la plenitud de su vida, y a la cual te entregaste en cuerpo y alma, sacrificando incluso tu carrera, has recobrado tu existencia. Es cierto que has pasado por muchas dificultades, y al parecer la seguirás pasando por la ingratitud de algunos, pero sé que en Shaila encontraras el apoyo necesario para superarlo prontamente. No me había enterado lo de tus memorias, pero ahora mismo voy a buscarlo. Ojalá pueda encontrar un ejemplar.
Te deseo mucho éxito en esta nueva faceta. Un abrazo.
MARIA GEMMA IGLESIAS LOPEZ
PERDON POR EXTENDERME TANTO,EN EL ANTERIOR COMENTARIO.TE MERECES LO MEJOR ANTONIO…ME HE ENTERADO DE QUE SON 66 AÑOS LOS QUE CUMPLES Y QUE ADORAS A TU MADRE COMO TODO BUEN HIJO.OJALA TE DURE MUCHOS AÑOS Y QUE TUS HIJOS TE QUIERAN POR ENCIMA DE TODO….YA QUE EL CARIÑO SINO ES PALPABLE,OCURRE COMO EL HUMO QUE SE ESFUMA SIN MAS Y QUE EL TEMA DE LA HERENCIA OS BENEFICIE A TODOS POR IGUAL.ME IMAGINO QUE A TU EDAD TIENES QUE VIVIR LO MEJOR POSIBLE Y TUS HIJOS LUCHAR POR SUS RESPECTIVOS TRABAJOS.LOS TRES SON MUY JOVENES Y CON POSIBILIDADES.CARMEN DICE MI HERMANO QUE ES PRECIOSA.LA BROOKS SHIELDS ESPAÑOLA LA LLAMA EL.QUE FUE SU AMOR PLATONIC0 DE JUVENTUD Y SHAILA SIN COMENTARIOS.ES TODO DULZURA.DE ANTONIO LO SIENTO PERO NO SE NADA.SOLO QUE ESTA SEPARADO DE EDURNE,LA CUAL HE VISTO EL MQB,Y QUE ES PADRE DE GEMELOS O MELLIZOS.SUERTE TAMBIEN.BESOS.
MARIA GEMMA IGLESIAS LOPEZ
Desde el primer día que vi la portada y el título del libro me entraron unas ganas irrefrenables de comprarlo.La respuesta es muy facil…¡Que pareja!.Quien entonces mejor que JUNIOR para contar el largo camino emprendido por el y su familia filipina hasta llegar a ESPAÑA y conocer a MARIETA, toda ella LUZ como el dijo, y que mejor TERAPIA para un hombre desecho en el dolor de pasar por una pérdida tan grande…PRECIOSO libro, bella y dulce historia de amor…y la más repetable de las vivencias de un matrimonio jamás contadas. Para mi es un libro escrito en MEMORIA de su MUJER,donde la ensalza en todos los momentos de su vida, asi como a sus hijos…todo un orgullo para mi cantante favorito de los años 60 . Lo animaria a seguir escribiendo o componiendo por que lo hace muy ien, tiene un tacto especial…es todo delicadeza, aunque tambien simpatía y camaraderia con ROCIO.Me parece la persona ideal para hablar de su mujer, ya que no esta y callar bocas inoportunas como las de JUAN GABRIEL y otras muchas…en cuanto al tema de la posible infedilidad a Marieta, me parece anecdótico. Y una vez mas el que queda mal es el, ensalzando de nuevo a su mujer, de conducta intachable….Pues podía haber callado y saltarse este capítulo de su vida, que seguro es mas extensa aun que lo recoge el libro.Aunque dicen que segundas partes nunca fueron buenas, personalmente le animaría a escribir otro, donde pudieramos apreciar más su breve y corta, aunque intensa carrera musical, asi como la de ROCIO DURCAL. Es decir un libro donde se resaltara mas la trayectoria musical de ambos, con sus conciertos,etc y no solo su papel como padres y abuelos, lo cual soy consciente de que lo han echo muy bien…Así mi querido JUNIOR perdería la mala fama que algunas personas por poco tolerantes le han dado, me refiero a comfundir lo afeminado, con ser guapo, bello, hermoso y delicado… y a ser un mantenido con ser un fiel seguidor y manager de su mujer, ya que esto también es un trabajo.Componía muy bien por lo tanto no creo que se le haya olvidado, quizas se le haya pasado la edad, segun dicen algunos de aparecer en directo, segun dicen algunos…por que le ha cambiado el aspecto desde la DEPRESION, pero como creo que ya esta recuperado porque todos le apoyamos para que salga de ese bache tan dificil .ANIMO y a COMPONER, que tienes toda una promesa de la cancion con SHAILA, y lo de ser abuelo de nuevo ya veras como tu hija te da esa alegría…la verdad es que en esta nueva etapa de tu vida una nena como tu bien dices te alegraría la vida, una pequeña Marieta, rancherita, ya que DORIO es mejicano sembraria la PAZ que todos necesitais despues de la pérdida de ROCIO y de tanta demanda y contrademanda. ANMO.Deseando pronto disfrutar de alguna creacion tuya.BESOS Y SUERTE.YA vereis como todo se arregla y hay una conciliacion familiar donde ninguno de sus miembros salga perjudicado.Escribo esto con ánimos de beneficiar a un cantante que poco disfrutamos, puesto que en seguida abandono su carrera musical por su familia, pero que esta en una edad, joven y a la vez madura en la que podría sorprendernos con alguna nueva creacion musical o literaria.UN ABRAZO MUY FUERTE DESDE ASTURIAS.
jose luis diaz
Sin duda un libro muy hermoso,cargado de anecdotas y de recuerdos, aunque a la escritora se le paso un poco la mano al dar ciertos detalles personales(intimos de las parejas)en ciero modo la gente eso lo tomo a mal, pues a junior se le respeta y se le quiere, pero a rocio se le adora.
Angi
ame su cancion -perdoname- en ingles, si que era un bombon me enamore en el tiempo jaja, saludos
LIBIA
Tras leer este articulo recuperé mi admiración y respeto por Junior. Quisiera que él supiera que comprendo su dolor, no comparto su manera de vida tras la perdida de Rocio, pero le pediría que no nos desilusione a sus admiradoras. Aqui estamos, en silencio, pero con nuestro deseo sincero que hasta el final de sus o nuestros días mantenga la cordura de un ser maravilloso que tan buen legado dejo en nuestra emotiva memoria no solo por sus canciones,por su entrega a su esposa, y en su momento a sus hijos, por su prolongación de vida artistica a través de sus hijas. Besos Antonio.
Miriam
Es un libro precioso, muy emotivo y sobre todo muy muy sincero. No esperaba menos de mi queridísimo Antonio.
Os recomiendo a todos que lo leaís.
Junior, un hombre, un marido, un padre, un abuelo, un artista…EJEMPLAR.
Te quiero Antonio, pronto te visito.
Un besazo enorme.